Obras

Cagliostro

1994


Dirección: Luis Ureta

Dramaturgia: Basada en la novela de Vicente Huidobro

Elenco: Andrés Céspedes, Roxana Naranjo, Patricio Contreras, Rodrigo González, Paula Zúñiga, Guillermo Calderón, Paula Silva

Diseño Integral: Gastón Vega

Vestuario: Maite Lobos

Música: Paablo Toledo

Realización Escenografica: Francisco Quiróz

La obra nos presenta a Giuseppe Bálsamo, más conocido como conde de Cagliostro (alquimista italiano, un poco charlatán, un poco brujo y un poco mago), en un país que ve con agitados ojos la llegada de la inminente revolución. Cagliostro cura enfermos a distancia, resucita muertos, ejerce sus poderes naturales con tal pericia, que llega a ser llamado a la corte de Luis XVI. Los sabios de la época (Rousseau, Danton, Marat) también se empeñan en conocer más sobre la ciencia oculta y fundaron una secta, con Cagliostro a la cabeza. Ebrio de ambición y poder, abusa de sus conocimientos en beneficio personal poniendo en riesgo el amor de Lorenza, la amante del nigromante, quien finalmente se suicida. Cagliostro comprende sus errores, destruye su templo de sabiduría y junto a su amada muerta, se pierden en la oscura  y brumosa noche.Solo flotan en el aire las preguntas: «…¿Qué pasó después?, ¿A dónde fue a refugiarse ? ¿Pudo vencer a la muerte? ¿Vive aún con los suyos en alguna parte?… ».

 

Cagliostro, de Vicente Huidobro, se estrenó el año 1994 en la Sala Agustín Siré.
Escrita inicialmente en francés (1923) para el cine y publicada con posterioridad en español en 1934 , Cagliostro, bajo el subtítulo de «novela-film», incorpora técnicas cinematográficas a la expresión literaria. Magia, ocultismo, ritualidad e intrigas palaciegas condimentan una historia, en la que el poder y la ambición ocupan un lugar de privilegio.
Antes de ser la «novela-film», el poeta Vicente Huidobro, había hecho de este argumento un guión pensado para ser llevado al cine mudo. El guión cinematográfico obtuvo un importante premio de 10.000 dólares por ofrecer «las mejores posibilidades para ser adaptado al cine, en Hollywood. Sin embargo, cuando en octubre de 1927 se estrenó The Jazz Singer, primer film sonoro, todos los proyectos de películas mudas se convirtieron en reliquias, entre ellos, Cagliostro».

El eclecticismo estético definió la propuesta escénica de Cagliostro. Texto y puesta en escena operan como ejes que, aunque complementarios, mantenían entre sí una relación de independencia. Elementos del cómic se mezclaban con momentos operáticos (como las entradas de los personajes por una puerta de cinco metros de altura). Con Cagliostro, nuestro colectivo dio un paso importante en cuanto al desarrollo de una poética propia. De esto dan cuenta algunos comentarios periodísticos, en los que algunos críticos hablaban de «La generación del relevo», a propósito del trabajo de La Puerta y la aclamada versión de Cagliostro.

«La versión teatral de Cagliostro del grupo La Puerta es un montaje fluido -desde el punto de vista plástico y narrativo-, realizado con refinamiento. Podríamos estar seguros de que el propio poeta Huidobro aplaudiría dichoso.»

Carola Oyarzún L. La Tercera, Junio 1994

«Bien apoyados por escenografía y vestuario, el montaje es visualmente atrayente y tiene una serie de aciertos… Fundamental es la buena actuación del conjunto en general, con su nivel de voz y dicción superior al habitual en nuestro teatro.»

Hans Ehrmann, La Nación, Junio 1994

«...la compañía “La Puerta” nos muestra un riguroso trabajo colectivo, con Luis Ureta dando rienda suelta a su creatividad e imaginación, es una puesta en escena circular, humorística, ingeniosa, desbordante de teatralidad. Para crear una nueva generación de relevo.»

Eduardo Guerrero, La Época, Junio 1994